Volviendo del viaje a Bélgica compramos en el aeropuerto de Bruselas un pack de quesos belgas. Si mal no recuerdo en el que compré yo venía queso de Chimay, Affligem y Brigand. Todos muy ricos, pero sobre todo el de Brigand con un olor insoportable. Sin lugar a duda el queso más mal oliente que haya probado. Y esto lo dice un asturiano acostumbrado al olor del queso cabrales.
Y claro, ahora si digo que la cerveza me recuerda algo al sabor del queso seguro que no se os ocurrirá probarla. Pero no, tranquilos, la cerveza huele y sabe bien. La elabora Van Honsebrouck, los mismos de las Kaastel o las lambic St. Louis y es la típica cerveza rubia fuerte belga.
